Aunque a fines del 2023 el Bitcoin mejoró su rendimiento, sigue siendo muy volátil en comparación con el oro y el ladrillo logrando que el sector inmobiliario se destaque nuevamente.
Desde 1977, el precio del oro ha aumentado significativamente, mientras que el valor por metro cuadrado de propiedades ha experimentado un crecimiento más moderado. La brecha entre ambos activos se ha reducido con el tiempo, debido a la apreciación del oro y a la depreciación de las propiedades.
Además de la comparación entre el oro y el ladrillo, se incluye de manera anecdótica la inversión en Bitcoin, que ha experimentado una fuerte volatilidad en los últimos años, pero ha tenido un rendimiento sobresaliente, superando ampliamente su valor inicial.
A pesar de las similitudes en las fluctuaciones entre el oro y el ladrillo, el oro ha mostrado un comportamiento más estable en general, mientras que las propiedades han experimentado altibajos debido a crisis económicas y devaluaciones.
Es importante considerar que el oro no genera ingresos adicionales, a diferencia de las propiedades que pueden generar rentas por alquiler. La inversión en Bitcoin ha demostrado ser volátil en el corto plazo, lo que plantea interrogantes sobre su estabilidad a largo plazo.
En conclusión, a pesar de la mejora en el rendimiento de Bitcoin y la estabilidad del oro, el ladrillo sigue siendo una opción rentable y sólida de inversión, como lo ha sido históricamente.
Fuente: Reporte inmobiliario